El proceso de cicatrización de heridas en veterinaria requiere no solo una buena protección del tejido, sino también condiciones que favorezcan su regeneración natural. Dentro de los activos más utilizados en clínica, destacan dos elementos clásicos: la plata coloidal y el aluminio micronizado.
La plata coloidal actúa como agente antimicrobiano, evitando la colonización bacteriana sin interferir con la viabilidad del tejido. Su acción se basa en la liberación de iones que alteran las membranas celulares de microorganismos patógenos. Por su parte, el aluminio micronizado forma una barrera física sobre la piel, que impide la entrada de contaminantes externos sin impedir la oxigenación del tejido.
Formulaciones modernas como las que encontramos en Kuivet Cintrix combinan estos ingredientes con otros bioactivos de origen vegetal, como el aceite de rosa mosqueta y la centella asiática. Esta sinergia no solo reduce la inflamación y favorece la regeneración, sino que también mejora la hidratación y la calidad del tejido cicatricial. Además, la posibilidad de aplicar estos productos en cualquier ángulo, gracias a sistemas de aplicación 360º, facilita el tratamiento en zonas complejas.
Estos avances permiten a los veterinarios intervenir con eficacia en heridas superficiales, rozaduras, zonas postquirúrgicas o lesiones crónicas, garantizando un entorno adecuado para la curación y reduciendo el riesgo de complicaciones.
